Números grandes

Pues… será verdad, pero no me creo nada. Resulta que uno de los motivos por los que me daba pereza dejar de fumar eran esos kilos que sabía que iba a ponerme encima. Y me mintieron de la peor de las maneras, quizá para que dejara de ambientar la casa de tabaco, pero me mintieron.

Entrenador-personal

Me decían que tranquilo, que iba a engordar unos kilitos, pero que los perdería en un par de meses, sin esfuerzo. Ya. Claro. Diez meses después de dejar el tabaco, seguía con casi treinta kilos de más: que si la ansiedad me llevaba a comer más, que si el metabolismo se ralentiza al dejar el cigarrillo… que si me descuido no quepo en mi cuerpo, vamos.

Por suerte, también me veo obligado a trabajar vía Internet, lo que me ha llevado a convertirme en un verdadero experto en buscar soluciones en la red. Y una de las ideas con las que me topé fue la de contratar a un entrenador personal. Concretamente, di con ella visitando la página www.onlinepersonaltrainer.es.

Sudando por salud

Vamos a ver: no hacen milagros, pero sí trabajan y te hacen trabajar, siempre de una manera sana; siempre en la dirección correcta, avalados por unos conocimientos que sólo los profesionales pueden tener. Se trata de un completo equipo de entrenadores personales, a tu servicio para que te pongas en forma o pierdas peso, para que hagas fitness, recuperes la figura tras un embarazo o mantengas una salud de acero.

Pero no se trata de imagen sino, sobre todo en casos como el mío, de salud. Por tal motivo, antes de empezar a diseñar el plan, tienes que rellenar un test-perfil, de modo que te diseñen un plan integral (dieta más entreno) completamente personalizado.

Profesionales de confianza

Y, hablando ejercicio físico, el entrenador no es el primer titulado en educación física con el que se han cruzado en la eteté: he estado trabajando con profesionales, titulados superiores, sí, pero con mucho más que un diploma: el personal a cargo de mi salud tiene, sin excepción, más de diez años de experiencia.

… ¡Y pensar que recuerdo a muy poquitos profesores de gimnasia en el colegio con los que llevara siquiera medio bien! Sin embargo, hoy por hoy, ha cambiado la historia, tal vez porque sí veo la necesidad de hacer ejercicio o quizá porque la relación con quien me pone a sudar (por mi propio bien) se ha vuelto más fluida.

Relación profesional y de confianza

Del mismo modo que cuando el tipo ese del chándal con olor a tabaco, ese de pit… silbato incansable llegaba al pabellón me entraban sudores fríos y era incapaz de articular palabra, a día de hoy estoy encantado de poder hablar cada día con mi entrenador, lo que lo convierte en verdaderamente personal.

Además de encontrar la amabilidad que no tenía el profe de educación física del instituto, así como la comunicación fluida, puedo hablar de que se han invertido los números: en tiempos estudiantiles, era un señor el que mandaba y ponía a trabajar a cuarenta montones de hormonas andantes;  a día de hoy, tengo a todo un equipo atendiéndome. Prueba de ello es que están atentos a mis dudas y preguntas de la naturaleza que sea las 24 horas, 7 días a la semana.

En fin, que te puedo contar las bondades de este equipo de profesionales de la salud y la forma física y escribir líneas y líneas, pero prefiero reducirlo a los siempre claros números. De un lado, una cifra grande: 3.500, que es la cantidad de personas a las que han ayudado a lograr sus objetivos desde 2010. Por otra parte, un número aún mayor, aunque no lo parezca: 25. Son los kilos que perdido en seis meses.