La rinitis es un síntoma que está asociado a distintos trastornos de salud principalmente a los catarros a alergias o incluso asma. Se trata de una congestión nasal, en concreto de las mucosas, originando picor, estornudos, obstrucción o taponamiento, lo que en ocasiones merma el sentido del olfato, y también secreciones diversas o un lagrimeo simultáneo.

Como hemos comentado la rinitis es uno de los síntomas asociados al resfriado común o incluso la gripe, pero cuando se produce de forma persistente puede deberse a otras causas, de hecho puede haber detrás una alergia o incluso al posible desarrollo de asma. En estos casos, si se tienen sospechas lo mejor es acudir un especialista que pueda determinar un claro diagnóstico.

Para tratar la rinitis existen distintas opciones médicas, pero en esta ocasión queremos resaltar  los beneficios que aporta la homeopatía. Esta es una terapia médica de base científica, pese a que en algunas ocasiones se la califique erróneamente como medicina alternativa,  y que se apoya en los medicamentos homeopáticos. Estos fármacos se fabrican empleando sustancias procedentes de plantas, animales, minerales o químicos. Los medicamentos homeopáticos se presentan principalmente en forma de gránulos y glóbulos, sin embargo su ingesta es muy sencilla pues se tratan de formas farmacéuticas sublinguales, es decir, se disuelven debajo de la lengua, por lo que su toma es muy fácil.

En el caso de la rinitis alérgica que suele deberse a la polinosis o la alergia al polen de las flores, se suele recomendar la toma de cinco gránulos tres veces al día durante la crisis de rinitis. Y lo habitual es recomendar medicamentos homeopáticos cuyo principio activo está basado en Apis mellifica, Allium cepa composé o Pollens.

Si por el contrario estamos hablando de una rinitis infecciosa, es decir, aquella que se debe a infección viral o bacteriana, el tratamiento varía. Si tenemos un flujo nasal primero claro, y luego espeso y amarillo verdoso, se aconsejan medicamentos homeopáticos basados en Nux vomica; pero si es flujo nasal es más bien acuoso, entonces se suele aconsejar Allium cepa composé o Arsenicum album, entre otros.

Ante la duda lo más recomendable es acudir a un médico especializado en homeopatía para que haga una valoración de cuál es el tratamiento más adecuado en nuestro caso.