La contaminación invisible llega en verano

El verano está a punto de llegar y los madrileños lo notarán en la calidad del aire que respiran. La falta de lluvia y el tráfico influye en el grado de contaminación del aire de la capital madrileña. Ahora que llega el calor, la sensación de ahogo y la polución en el aire se disparan creando problemas de salud como la EPOC, además de aumentar los niveles de contaminación por ozono

La llegada del verano también dispara el consumo de aire acondicionado, consumo que puede disparar nuestra factura de la luz y darnos más de un sorpresa en estos meses de vacaciones. Cada vez más gente busca cómo ahorrar en la factura de la luz, por lo que la búsqueda de la eficiencia energética se convierte en una necesidad.

Cómo mejorar la calidad del aire de nuestra casa

El aumento de la temperatura en verano puede perjudicar a nuestra salud. Los hogares absorben el calor exterior durante el día y, si a la noche la temperatura no desciende el ambiente interior, la sensación de ser un horno se convierte en una realidad  porque las paredes siguen irradiando calor.

Por eso, los ventiladores y los aires acondicionados se han convertido en aliados perfectos contra el calor y el bochorno de esta estación.

Cuidado con el aire acondicionado

La relación entre el sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado, los requisitos de espacio ocupado, los materiales del edificio, las condiciones meteorológicas y la presión diferencial es un proceso dinámico que no deja de cambiar para el diagnóstico de la calidad del aire. Si los volúmenes de aire de los conductos del sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado no fueran los apropiados, el aire no se acondicionaría según los fines para los que se diseñó el equipo, los costes de funcionamiento serían elevados y la esperanza de vida del aparato se vería reducida

Mantener una temperatura y humedad constante es una de las claves  para mantener un aire limpio. La limpieza de las habitaciones, muebles y otros artículos; mantener limpios los filtros del aire acondicionado; evitar que se acumule polvo y mantener un nivel de humedad estable  son claves para mantener una calidad del aire óptima.

Con el verano, el ozono se dispara

El ozono troposféricos es un contaminante secundario que, por inhalación, provoca irritación de los ojos y vías respiratorias superiores, un incremento del riesgo de enfermedades respiratorias agudas y reducción de la función pulmonar. Enfermedades como la EPOC o el asma aumentan en verano por este tipo de ozono.

Los principales sectores que emiten los precursores del ozono son el transporte por carretera, las termoeléctricas, la calefacción domestica a gas, ciertas industrias, incineradoras y el almacenamiento y distribución de combustibles fósiles.

Por lo tanto posibles medidas de reducción de la contaminación por ozono serían:

  • Disminución del tráfico rodado. Aprovechar el buen tiempo del verano y utilizar la bicicleta o el transporte público. También es bueno aprovechar para darse paseos, evitando las horas de mayor calor.
  • Ahorro de energía. Instalar sistemas de eficiencia energética o utilizar los electrodomésticos solamente cuando sea necesario nos ayudará no solo mejorar el medio ambiente sino a evitar un susto en la factura de la luz.