Salud y mujer: consigue un estilo de vida saludable

La preocupación por llevar un estilo de vida saludable ha pasado a ser de muchas personas en los últimos años al tiempo que aumentaba la concienciación sobre los problemas que surgen cuando descuidamos esta parte de nosotros. Los consejos que se suelen obtener en este ámbito suelen ser muy similares: comer sano, practicar deporte, mantenerse hidratado… Por ello hoy os traemos algunos consejos menos comunes que permiten mejorar la salud de la mujer y que no suponen un gran esfuerzo.

Mantén tu mente ocupada y plantéate objetivos

A corto, medio y a largo plazo. Tener la mente ocupada sin sobrecargarla es fundamental para sentirse bien con uno mismo. Nos ayuda a mantenernos ocupados y eliminar pensamientos negativos. Los objetivos pueden ser personales, laborales o físicos, desarrollándonos en los distintos campos.

Meditación

Aunque a veces existe la connotación espiritual de la meditación, se trata de sencillos ejercicios a través de los cuales podemos sanar las preocupaciones de la mente con sólo aprender a respirar. La mente es maravillosa, pero también una trampa para muchas personas que a veces nos hace enfocar las cosas desde un punto de vista absolutamente perjudicial. Además, si meditas antes de ir a dormir, tus ciclos del sueño serán más limpios y te sentirás mejor a lo largo del día

Sueña

En ocasiones solemos centrarnos en aspectos muy realistas de nuestras vidas. No obstante, si nos fijamos objetivos en nuestro día a día y los vamos cumpliendo, tenemos motivos para soñar que un futuro mejor está por llegar. Plantéate sueños y atrévete a perseguirlos, pues llenar tu mente de pensamientos positivos te hará llevar un estilo de vida más ordenado y saludable.

Disfruta del ocio

Está bien fijarse objetivos en los distintos ámbitos de nuestra vida, pero resulta fundamental entender el ocio como una obligación en nuestra vida. Probablemente entre semana tengas menos tiempo que otros días, pero debes de hacer un esfuerzo extra y reservar unas horas de tiempo mínimo a la semana para hacer actividades de disfrute personal, ya sea en soledad o con compañía. 

Respecto a la parte más física de la vida saludable, cada vez son más las personas que apuestan por productos naturales para su cuidado personal. Las ventajas del aloe vera son por todos ya conocidas. Piensa un segundo en los últimos años: ¿cuántas cremas milagrosas han aparecido en los últimos años para después desaparecer? Muchas. En cambio el consumo de aloe vera se ha mantenido estable. Eso sí que es un milagro.  Por las noches, dedícate un tiempo a ti misma. Date una ducha templada, aplica aloe vera por tu cuerpo y siéntate a meditar, mientras disfrutas del proceso de relajar tu mente al tiempo que tu cuerpo se va hidratando. Cuando termine el proceso, te sentirás hidratada por fuera y relajada por dentro e irte a la cama será un placer del que disfrutarás a diario. Si ya lo decían los romanos: Mens sana in corpore sano.